El ministro de Desarrollo Económico y Producción, Exequiel Lello Ivacevich, anunció la firma de un acuerdo con la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar) con el objetivo de fortalecer la producción de vino en la provincia de Jujuy.
De acuerdo con el propio Lello Ivacevich, Jujuy cuenta con “los mejores vinos de altura, por eso es importante generar políticas que fortalezcan al sector y permita posicionarnos como una provincia vitivinícola”, y señaló que la provincia “es nueva en materia vitinvinícola, por lo que es necesario impulsar estudios e investigaciones que permitan tener datos específicos de caracterización para el desarrollo de la actividad vitivinícola”.
A partir de la firma del acuerdo, se buscará que Jujuy integre el “Programa de Vitivinicultura Inteligente” que COVIAR mantiene con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y cuyo objetivo es contribuir a incrementar la competitividad y productividad del sector vitivinícola en Argentina, dando una “caracterización de las zonas vitivinícolas particularmente en la geolocalización morfológica de suelo y también la caracterización socio cultural de las zonas vitivinícolas”.
Por su parte, la secretaria de Vitivinicultura de Jujuy, Verónica Sata completó: “este acuerdo es muy importante porque va a acompañar a todos los sectores vitivinícolas en una caracterización que les proporcionarán características diferentes y distintivas de cada lugar”.
El convenio, detalló, “tiene por objeto regular las relaciones entre COVIAR y la provincia para la elaboración del Estudio para la caracterización de las regiones vitivinícolas de Jujuy. Así, la provincia aportará los recursos financieros necesarios para la elaboración del estudio, en tanto que la Corporación aportará los recursos técnicos de coordinación general del estudio y la incorporación de los resultados del mismo a los resultados y productos generados en el Programa de Vitivinicultura Inteligente”.
Finalmente, José Zuccardi, presidente de la Coviar, completó: “La configuración geográfica de Jujuy cuenta con una variación de suelo, clima muy especial y una corriente turística que le da un plus más que establece el vínculo con los productores y el turista”. “Estas características son fundamentales, ya que interactuar con los que compran el vino achica la distancia de la comercialización. Y además potenciar el turismo y el desarrollo de economía regional”, finalizó.
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